1123 - Isaías 10. La caída del imperio Asirio. Is 10:1-2

1123 – Is 10:1-2 – Isaías 10. La caída del imperio Asirio.¡Ay de los que dictan leyes injustas, y prescriben tiranía, para apartar del juicio a los pobres, y para quitar el derecho a los afligidos de mi pueblo; para despojar a las viudas, y robar a los huérfanos! El pecado siempre acarrea consecuencias. Dios traslada al profeta del futuro (Is 9:1-7) al tiempo de Isaías (Is 9:8-10:34) para advertir a Israel sobre el castigo por sus pecados. El pasaje de Is 9:8-10:4 responde la pregunta: ¿Por qué castigó Dios tan severamente a su pueblo? El mensaje general es que el castigo siempre sigue al pecado. “sabed que vuestro pecado os alcanzará.” (Nm 32:23). Habían sido castigados y seguirían siéndolo hasta que se convirtieran al Señor. “Pero el pueblo no se convirtió al que lo castigaba, ni buscó a Jehová de los ejércitos.” (Is 9:13). Hay diferencia entre disciplina y castigo. No menospreciemos la disciplina de Dios. “Porque el Señor al que ama, disciplina, y azota a todo el que recibe por hijo.” El que menosprecia a Dios será castigado (He 12:4-11). Los cuatro pecados condenados son: (P1) La arrogancia (Is 9:8-12). (P2) La falsedad (Is 9:13-17). (P3) La falta de compasión (Is 9:18-21). (P4) La injusticia (Is 10:1-4). La ira de Dios castigaría cada pecado y finaliza con la frase: “Ni con todo eso ha cesado su furor, sino que todavía su mano está extendida”. Dios usaría como instrumento a Asiria para castigar a Israel.I. Asiria cumpliría con la voluntad de Dios (Is 10:5–11). “Oh Asiria, vara y báculo de mi furor, en su mano he puesto mi ira. Le mandaré contra una nación pérfida, y sobre el pueblo de mi ira le enviaré, para que quite despojos, y arrebate presa, y lo ponga para ser hollado como lodo de las calles.” (Is 10:5-6). Asiria era la región ubicada en el antiguo oriente que se extendió desde Mesopotamia (Irak) hasta el Asia Menor (Turquía), y hacia el sur hasta Egipto bajo el nombre del Imperio Asirio. Dios usaría a los asirios para castigar a Israel (Efraín, diez tribus del norte), nación pérfida (perversa), por sus pecados. ”El que encubre sus pecados no prosperará; mas el que los confiesa y se aparta alcanzará misericordia.” (Pr 28:13). II. Castigo para Asiria (Is 10:12–19). “¿Se gloriará el hacha contra el que con ella corta? ¿Se ensoberbecerá la sierra contra el que la mueve? ¡Como si el báculo levantase al que lo levanta; como si levantase la vara al que no es leño!” (Is 10:15). La soberbia de los asirios fue el pecado principal de su castigo. Pronto se cumplió la profecía sobre el juicio de los asirios. En el año 710 a.C., el ángel de Jehová quitó la vida a 185.000 soldados asirios (Is 37:36-37). Más tarde, el Imperio Asirio cayó ante Babilonia para nunca volverse a levantar como potencia mundial. “Antes del quebrantamiento es la soberbia, y antes de la caída la altivez de espíritu.” (Pr 16:18). “Mas antes, oh hombre, ¿quién eres tú, para que alterques con Dios? ¿Dirá el vaso de barro al que lo formó: ¿Por qué me has hecho así? ¿O no tiene potestad el alfarero sobre el barro, para hacer de la misma masa un vaso para honra y otro para deshonra?” (Ro 9:20-21). III. El remanente de IsraeL (Is 10:20–23). “En aquel tiempo … El remanente volverá, el remanente de Jacob volverá al Dios fuerte.” (Is 10:21). Isaías continúa con la teología del remanente, el pueblo dentro del pueblo, el pueblo fiel a Dios.