1163 - Jeremías 30-31. El libro de consolidación (I). Jer 31:33

Descansando en Dios - A podcast by Francisco Atencio

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1163 – Jer 31:33 - Jeremías 30-31. El libro de consolación (I).Pero este es el pacto que haré con la casa de Israel después de aquellos días, dice Jehová: Daré mi ley en su mente, y la escribiré en su corazón; y yo seré a ellos por Dios, y ellos me serán por pueblo.En el libro de consolación en Jeremías 30–33 se relacionan los acontecimientos que estaban sucediendo en tiempos del profeta con el plan eterno de Dios para Israel. En estos capítulos se explica de nuevo que el juicio era parte del plan divino, el cual contemplaba la restauración del pueblo escogido en el futuro. La primera parte del libro de consolación contiene el nuevo pacto hecho por Dios para Israel y gentiles (Jer 31:33-34), con sus tres componentes: Derramamiento del Espíritu Santo, el perdón de los pecados y la ciudad de Dios. La segunda parte del libro de consolación (Jer 32-33) continúa con las bendiciones de la restauración de Israel. El libro de consolación finaliza con un resumen de las bendiciones del pacto Abrahámico y Davídico, que se cumplirán en el día de la restauración y las promesas que Dios hizo a David acerca de su trono. No faltaría descendiente de David para reinar sobre ellos. Dios dice: “haré brotar a David un Renuevo de justicia, y hará juicio y justicia en la tierra. En aquellos días Judá será salvo, y Jerusalén habitará segura, y se le llamará: Jehová, justicia nuestra (Jehová Sidquenuc).” (Jer 33:14-26).I. Liberación física de la nación (Jer 30:1-11). Dios dijo a Jeremías que escribiera en un libro todas las palabras que le había hablado acerca de las promesas y palabras de consuelo para los exiliados después que cayera Jerusalén (Jer 30:1-3). El libro tendría esperanza. Jehová dijo: He aquí que vienen días en que tomaría a su pueblo para restaurarlo. El uso que hace Jeremías de “días” describe dos períodos distintos de tiempo. El primer “día” al que se refirió fue el momento de la destrucción, cuando Dios juzgaría a Judá por su pecado (Jer 5:18; 7:32; 9:25; 19:6). El primer día se cumplió cuando Judá cayó ante el ataque de Babilonia (Jer 39). El segundo día es futura, escatológica, a cumplirse en la tribulación y el milenio. (Dt 30:1-10.). En Jer 30:4-7 habla de la futura aflicción del pueblo, “un tiempo de angustia para Jacob”. Dios rescatará a su pueblo de su aflicción. ¿A qué “tiempo de angustia” se refería Jeremías? Se refiere a la gran tribulación, los 3.5 años, finales de la tribulación. (Dn 9:27; 12:1; Mt 24:15-22; Ap 12:17; 13:7). Ese período de aflicción terminará con la segunda venida de Cristo para rescatar a sus elegidos, hacer juicio a las naciones y establecer su reino milenial (Jer 30:8-11; Mt 24:30-31; 25:31-46; Ro 11:26; Ap 19:11-21; 20:4-6). Cristo afirma: “Ciertamente vengo en breve. Amén; sí, ven, Señor Jesús.” (Ap 22:20).II. Sanidad espiritual de la nación (Jer 30:12-17). “Porque así ha dicho Jehová: Incurable es tu quebrantamiento, y dolorosa tu llaga.” (Jer 30:12). El pecado de Israel ocasionó sus heridas. (Jer 30:12–15). Pero Dios curará las heridas y traerá salud espiritual a Israel. “Mas yo haré venir sanidad para ti, y sanaré tus heridas, dice Jehová”. (Jer 30:16-17; Zc 12:10-13:1).